Las ventas mundiales de la marca VW cayeron a 394.000 unidades en febrero, sensible baja si se comparan con las 413.700 que vendió en el mismo mes de 2015.
El descenso en China, según los analistas, se debió a las celebraciones por el Año Nuevo local; el volumen en Rusia, se redujo por la recesión del mercado interno; en EE.UU, resultó muy negativo el engaño por las emisiones de sus motores diesel; mientras que en Brasil, se produjo una situación similar –aunque agravada- a lo sucedido en Rusia.
Sin embargo, las ventas de la marca en Europa, donde VW está retirando 8,5 millones de unidades diesel para solucionar el problema del software adulterado, subieron un 3,7%, lo que llevó al responsable máximo de ventas y marketing, Juergen Stackman, a declarar, “nuestros clientes siguen siendo fieles en este período tan difícil”.
Cifra similar registró en el mercado local de Alemania, lo que hace suponer que la marca podría crecer todavía más a nivel continental, considerando el inminente lanzamiento de la última generación del Tiguan, el segundo SUV más vendido de Europa luego del Nissan Qashqai, modelo que ya tiene 15.000 pedidos anticipados registrados en el último mes y medio.