El nuevo “SLK/SLC” se presentará en el próximo Salón de Detroit 2016 con un frontal más deportivo todavía que remite al SL roadster, donde se destaca una parrilla identificada con otros modelos de la marca –Clase S coupé, algunos compactos y el citado SL- que Mercedes denomina rejilla de diamantes.
Acompañando esta incorporación, llegan nuevos grupos ópticos Leds con diseño aerodinámico y muy bien integrados, amplias tomas dinámicas que caracterizan la zona inferior y una muy destacada estrella en el centro de la parrilla.

El repaso general del modelo llega hasta el interior, donde ahora hay un panel de instrumentos modificado y adopta una pantalla táctil de 7” en lugar de la de 5,8” de la variante anterior.
También incorpora un volante con mayor grip y nuevos revestimientos con abundancia de aluminio.
El motor básico del SLC será el cuatro cilindros, 2.0 litros, naftero de 241 CV y un V6/3.0 litros de 362 CV estará disponible para la versión AMG.
Nuevas opciones de colores y la presencia del Active Brake Assist (frena automáticamente la unidad ante una colisión inminente) son norma en el nuevo Mercedes.

Este profundo repaso que tuvo el modelo y que, entre otras cosas, se aprovechó para el cambio de nombre tal como se viene haciendo con toda la gama Mercedes, habla de la intención de recuperar sus ventas, sobretodo, en EE.UU, donde la comercialización de la versión actual disminuyó el mes pasado un 11% respecto a noviembre de 2014.
A partir de medidas tomadas por el nuevo gobierno y contando con la complicidad del público de Argentina respecto a la identificación de la silueta SLK, ahora SLC, el nuevo deportivo se convertirá en gran candidato a desembarcar en el país en el último trimestre de 2016.