El último ejemplar de la clase LMP1 (Le Mans Prototipo) de Audi que será reconocido por la sigla R18, participará en la subclase 6MJ (Seis Megajoules) en 2016, sucediendo a la versión 2015 que lo hiciera en la especialidad 4MJ.
Con esta versión 2016 del exitoso modelo, Audi abandona el almacenamiento de energía por volante y sistema de baterías, utilizado desde la llegada del R18 e-tron quattro en 2012, adoptando un sistema con baterías de iones de litio, la misma tecnología empleada por su rival y dominador de la temporada actual, el Porsche 919 Hybrid.
El salto hacia la subdivisión diesel-6MJ, además, debería poner a la marca en igualdad de condiciones, desde lo tecnológico, frente a sus competidores Porsche y Toyota, quienes participan en la división más alta, nafta-8MJ, y lo seguirán haciendo en 2016.
Efectivamente, las innovadoras reglas de LMP1, introducidas en 2014 y basadas en la recuperación de energía, tenían prevista una equiparación entre un TDI 6MJ y un naftero 8MJ.

Acompañando esta modificación, el nuevo R18, orilla los límites de la aerodinámica a partir de lo que sugieren estas primeras imágenes, tratando de optimizar su silueta para lograr la máxima eficacia en aceleración, velocidad intermedia y máxima, déficit que experimentó en la mayoría de los escenarios del mundial 2015.
El nuevo Audi giró por primera vez con Filipe Albuquerque en Paul Ricard y, desde principios de diciembre, iniciará una nueva sesión de pruebas en el circuito de Sebring, Florida, EE.UU.
Casi a la par de este lanzamiento, Audi confirmó las tripulaciones de los dos autos que presentará durante la temporada, Fassler-Lotterer-Treluyer y di Grassi-Duval-Jarvis.
También, a propósito de esto último, Audi y Porsche acordaron presentarse en las 6 Horas de Spa y las 24 Horas de Le Mans con solo dos vehículos por marca, en lugar de los tres habituales, en clara señal de que si bien el programa de carreras de las marcas del Grupo VW no se había modificado en lo tecnológico por el escándalo de las emisiones, el ahorro de un vehículo y todo su desarrollo, significaba la mejor señal de coincidencia con los recortes presupuestarios previstos.