Toyota comunicó que sus ventas mundiales de vehículos hasta septiembre de 2015 habían ascendido a 7.490.000 unidades, unas 60.000 más que su rival, el Grupo VW, con entregas que, en ambos casos, disminuyeron un 1,5%.
VW fue líder en las ventas mundiales en los primeros seis meses del año, sin embargo, el futuro no se plantea de la misma forma, a partir de la reconversión de 11 millones de unidades y de dejar de vender en varios mercados vehículos equipados con los motores tdi de cuatro cilindros tipo ES 189 cuestionados.
Otro factor que afectará a VW es la desaceleración de sus ventas en China, el mayor mercado único para el grupo, donde sufrió una caída del 7,4% en los primeros nueve meses de este año.
Por su parte, el tercero en discordia, el grupo GM, tuvo una baja del 1,9% durante el mismo período del año, con ventas de 7.200.000 unidades que lo ubican en el tercer lugar.

Aprovechando esta coyuntura y para consolidar su liderazgo, Toyota tiene argumentos de ejecución inmediata.
En breve, comenzará las entregas de la versión renovada del Prius, el híbrido más vendido en el mundo. Modelo que entrará en una nueva etapa luego de siete años sin actualizaciones, con una mejora en la economía de combustible del orden del 10% y una versión Eco que le daría un impulso todavía mayor.
La compañía planea incorporar unos 1.400 operarios en sus plantas de Japón, tanto para incrementar la producción del nuevo Prius, como para afrontar la renovación del SUV Land Cruiser, el vehículo más caro de su gama.
Ambos modelos fortalecerán sus exportaciones a partir que tendrán innovaciones destacadas y, por sobretodo, su impronta de ser construidos exclusivamente en Japón, mercado de origen de la marca.