Industria Automotriz
SALÓN DE BS.AS 2015
LA CRISIS LE GANÓ A LA ACTITUD
29/06/2015. Pocas horas atrás cerró el 7º Salón del Automóvil de Buenos Aires y los organizadores informaron que la muestra fue visitada, durante los 10 días de exhibición, por 458.008 personas, casi un 19% menos que en la edición anterior de 2013 (564.706), pero?
…Si bien es cierto que el éxito o el fracaso de un show de estas características no solo debe medirse por el público asistente, la realidad fue que hubo una sensible baja y que esta baja fue consecuente con una exhibición donde, los vehículos no tuvieron precio, resultó una combinación algo confusa entre Salón del Auto, Autoclásica, Hot Rods y Racing Cars Show y como nunca, pesaron las ausencias de varias marcas características de estas muestras.
Factores a los que, seguramente, se sumó la situación por la que atraviesa el sector automotriz en el país, con caídas en patentamientos que este año podrían superar el 20%.
No alcanzó la actitud de la mayoría de las empresas presentes para compensar tamaña desventaja, como tampoco la generosa promoción realizada en forma directa o indirecta (no hay que olvidar que hubo 1.914 periodistas acreditados), ni siquiera la presumible avidez del público en general por volver a ver novedades de último momento después de dos años.
Sin embargo, el Salón fue epicentro de noticias y concreciones de gran importancia que hicieron foco en su realización: el debut de Nissan como fabricante y el proyecto pick up de la Triple Alianza con Renault y Mercedes, los debuts mundiales de Renault (pick up Duster Oroch y Sandero RS), la confirmación de la llegada del Mustang para 2016, la presentación en sociedad del Mercedes-Benz Vito de fabricación local, el debut regional del Audi Q7, el debut-anticipo del Jeep Renegade, el Honda HR-V nacional, el adelanto del 2008, el SUV de Peugeot, etc, etc.
O sea, si bien el resultado no fue todo lo favorable que habría que esperar de una muestra de este tipo, aunque no de esta en particular, la dinámica y la actitud de muchos de los involucrados (desde las empresas hasta los particulares) fue consecuente con la envergadura del acontecimiento.
Una muestra que el espíritu del Salón fue salvado.
Como habrá que salvar los dos años que faltan para que la muestra vuelva a la Argentina, cuando quizás nos encontremos con un mercado recuperado, con la afluencia de marcas que en esta edición estuvieron ausentes y donde este supuesto crecimiento, obligue a los organizadores a pensar en otro escenario que brinde comodidades para público e involucrados que en este 7º Salón apenas alcanzaron…