REQUIEM PARA UN DICTADOR
30/04/2015. Ferdinand Piech (78), presidente del consejo y patriarca del grupo VW, quien renunció a su cargo durante el fin de semana pasado, fue víctima de su propia estrategia, al comprometerse para apoyar al CEO del grupo alemán, Martin Winterkorn y luego conspirar contra él con intención de instalar en su lugar al CEO de Porsche, Matthias Mueller. El poderoso comité de empresa de la compañía y el estado de Baja Sajonia, principal accionista del grupo, decidieron que había sido suficiente y pusieron coto a las intenciones del nieto de Ferdinand Porsche, quien recibió un ultimátum terminante: renunciar o ser removido a través de una votación cuyo resultado estaba poco menos que anticipado por la mayoría de los integrantes del comité. La salida de Piech representa el final de una era para quien hizo de VW poco menos que su propio estado feudal durante los últimos 20 años y su sucesor interino, hasta que sea elegido un nuevo ejecutivo, será el ex jefe del influyente sindicato alemán IG Metall, Berthold Huber, figura que calmará la agitación de los últimos días, porque como bien es sabido, ?nada funciona en VW sin los sindicatos?, frase que también plantea lo que habrá que esperar de la nueva conducción de la compañía que quiere ser la nº1 del mundo en 2018.
