Los intensos rumores de las últimas horas sugieren que la posibilidad de que el atrevido Hyundai Santa Cruz se encamine hacia la línea de montaje, es cada vez más cierta.
Como adelantábamos, el formato no es nuevo y además de intentar seducir por su silueta original, le apunta también al lado coherente de la propuesta, en este caso, a esos clientes quienes no necesitan de todas las posibilidades de una pick up tradicional, pero que todavía disfrutan de la dinámica de manejo de una plataforma basada en un auto.
Esta alternativa está avalada porque el Santa Cruz no necesitaría un gran volumen de venta para justificar su presencia, sobretodo en EE.UU.
Si la marca no se engaña con la idea de que esta podría ser su entrada al segmento pick up del mercado americano, las cosas le podrían ir muy bien.
En cambio, si se quiere atraer a los clientes normales de pick up, ofreciéndoles una solución creativa a una necesidad no satisfecha, este no tendría que ser el vehículo que Hyundai debería proponer.
Y creemos que los coreanos lo saben…