Desde 2011, BMW y Toyota iniciaron una cooperación que, en principio, estuvo destinada a trabajar con motores diesel y luego se amplió incluyendo estudios sobre la tecnología de la pila de combustible, materiales livianos y hasta el desarrollo de partes y elementos para un deportivo futuro.
Ahora, todo indica que la cooperación se ha estrechado todavía más, a partir de una información surgida de la revista alemana Autobild, que indica que ambas partes estarían trabajando en el desarrollo de un city-car destinado a ser entrada de gama para Mini y Toyota.
Basado en el Mini Rocketman, prototipo que debutó en Ginebra 2011, el nuevo Minor tendría un largo máximo de 3m45, siendo unos 37 centímetros más corto que el Mini tres puertas.

El pequeño modelo sería sensiblemente más barato que el más barato de los Mini (unos 17.000 euros), podría añadir una versión eléctrica luego de que los modelos con propulsión convencional sean lanzados en 2018/19 y además, nutrirá a una gama despoblada, luego de la desaparición del Paceman, el Coupé y el Roadster, con un modelo más económico y, supuestamente, más popular.
Con el Minor, se recuperaría un nombre legendario en la historia de Mini, que podría contribuir a su salida airosa del intento por convertirse en una división rentable dentro del grupo BMW.