Entre los detalles salientes que destacaba la serie televisiva Miami Vice estaban, el nivel que proponían los lugares vips de la ciudad, la abundancia de chicas en bikini y el despliegue de la pareja protagonista, Don Johnson y Philip Michael Thomas (interpretando a los detectives Sonny Crockett y Ricardo Tubbs, respectivamente) que acompañaban la tendencia alternando, hoteles cinco estrellas y mansiones, con Mustangs, Camaros, Mercedes, un superbote off shore y, finalmente, la frutilla del postre, una impactante Ferrari Testarossa blanca que, en la serie, era propiedad del citado Crockett.

Como toda Ferrari que se precie de tal, también esta Testarossa (modelo del que se produjeron algo más de 7.100 unidades entre 1984 y 1991) tiene una historia particular, que culmina con una prolongada vigencia y final feliz…
Antes de incorporarse definitivamente al staff de la serie, la Testarossa era reemplazada por réplicas similares en algunas grabaciones que implicaban cierto riesgo para su integridad, cosa que llegó a oídos del propio Enzo Ferrari, quien inició inmediatamente acciones legales contra la producción de la serie.

Después de varios enfrentamientos, finalmente, ambas partes se pusieron de acuerdo y la producción comenzó a utilizar Ferrari originales, que salían de fábrica con una placa conmemorativa especial.
Una de esas Testarossa es la que hoy se vende por eBay, equipada por un no menos mítico V12 a 60º de 4.9 litros y 390 CV, al cual va acoplada una caja M5.

Y el precio que fijó el actual dueño también forma parte de la historia, ya que pide u$s 1.400.000, dinero suficiente para comprar al menos una docena de modelos similares pero, claro, sin la trascendencia que le brinda a esta el haber sido poco menos que coprotagonista, junto al notorio Johnson, de una de las series policiales más sofisticadas, por más que su dependencia del detective se terminaba cada vez que se apagaban las luces del set…