A partir de una presencia bastante acotada en materia de motorizaciones diesel, GM, planea enfocarse en la tendencia con la intensidad que nunca tuvo hasta el momento.
El único auto del grupo en EE.UU que está equipado con motor diesel es el Chevrolet Cruze, que cumplió satisfactoriamente con las expectativas de la marca.
La restante unidad del grupo es el motor Duramax V8, que se propone como opcional para trabajo pesado en las líneas Chevrolet y GMC.
La tercera alternativa diesel está programada para 2016 y se trata de un cuatro cilindros, 2.8 litros, que podría estar disponible para las pick up medianas GMC Canyon y Chevrolet Colorado.

Sin embargo, el vicepresidente de GM, fue todavía más allá, “el Chevrolet Cruze será el primero de muchos autos de turismo con motor diesel que GM ofrecerá en EE.UU”.
Si bien no anticipó modelos que recibirían dicha motorización, hizo hincapié en las necesidades de los mercados por venir, donde la potencia máxima no será el parámetro principal, sino el torque, por su “fuerza de aceleración y arrastre de cargas pesadas”, lo que automáticamente habilita a las pick up citadas como receptoras de dicha mecánica.
Sobretodo, para equiparar el gran éxito de la Ram 1500 que, además, es la más económica del su segmento y para neutralizar el lanzamiento de la Ford F-150 que será muy ligera por la presencia de abundante aluminio en su construcción.