Singular historia deportiva de Toyota que pese a innumerables victorias y títulos en especialidades menores, nunca alcanzó similares consagraciones a nivel superior.
Es cierto que se coronó en WRC hace algunos años atrás, sin embargo, esto que podría haber sido un revulsivo para su historial deportivo, no tuvo continuidad con victorias y mucho menos títulos, en las máximas expresiones del automovilismo mundial, la F1, las 24 Horas de Le Mans y el Dakar y no es porque la marca japonesa no lo haya intentado con todo su potencial…
Trató de conseguirlo en F1 con el mayor presupuesto que la categoría haya visto, estuvo a punto de lograrlo en Le Mans varias veces pero también fracasó y en el Dakar, pese a que nunca tuvo presencia oficial, lo buscó a través de filiales o bien de la mano del equipo semioficial más encumbrado, el Overdrive, que le posibilitó protagonismo y podios, pero nunca una victoria absoluta.
Equipo este último, que nuevamente queda en el centro de la escena, a partir del contrato que oficializó el ingreso de Nasser Al-Attiyah a Toyota para correr en la especialidad teniendo como objetivo principal el Dakar 2015.

Con Al-Attiyah y de asegurarse la continuidad de otro ganador del Dakar, Giniel De Villiers, Toyota lograría uno de los mejores planteles de pilotos de la especialidad, comparable a la alineación de Peugeot con Peterhansel y Sainz a la cabeza.
Según el qatarí, “Toyota me lo había pedido hace tiempo, pero yo estaba ligado a un equipo diferente, creo que ahora es el momento idóneo para cambiar por ellos, porque tienen un vehículo muy fuerte. Estuve en Mini, que ganó el último Dakar, pero Toyota nunca lo ha ganado y quiero ser el primer piloto que lo logre con la marca. Ese fue el motivo principal para venir a Toyota”.
Seguramente, las pruebas del qatarí con Toyota, con quien ya tuvo relación e inclusive ganó el Sealine de Qatar en 2012, se iniciarán a la brevedad, habida cuenta de que la pick up Hilux es un vehículo cuyo desarrollo principal ya está logrado. Inclusive, se especula con la participación del binomio en alguna prueba previa al Dakar, como podría ser la Baja España-Aragón o bien el Rally de Marruecos.