Inspirado en el Wild Rubis, con personalidad propia y marcando sensibles diferencias con el family feeling de Citroen, DS presentó su esperado SUV Premium.
Casi una declaración a partir de las afirmaciones de Carlos Tavares días atrás, cuando dio por sentado que DS será la tercera marca del grupo, enfocándose al segmento Premium, pero con estilo francés, “aunque haya que esperar 20 años para lograrlo”…
Este primer paso dado por la nueva división de PSA propone un intento destacado, no será un TT típico, por más que su forma lo anticipe y solo tendrá tracción delantera, aunque lo compensará optimizando la gestión mediante Grip Control, por más que desde la marca se lo presente y destaque como que “…tendrá la versatilidad de un SUV, con la sofisticación y refinamiento de DS”, aprovechando la ocasión para adjudicarle a la división su propio espacio dentro del esquema de PSA.

Mide 4m55 de largo y tiene una distancia entre ejes de 2m73, está motorizado por el conocido y eficiente naftero THP 1.6 litros, en versiones de 160 y 200 CV en ambos caso con cajas A6.
Todo hace suponer que el nuevo 6WR está montado sobre la nueva plataforma modular compacta EMP2, compartiendo muchos elementos con el C4 Picasso que por estos días se estará presentando en Argentina.
Estéticamente, llama la atención la nueva parrilla y, en general, el nuevo frontal, muy distinto a lo visto en los modelos de la marca que, hasta ahora, tuvo a DS entre sus filas.

Atrás, los faros están integrado al portón y los flancos presentan abultados pasarruedas para albergar a ruedas montadas sobre llantas de 19” y se destaca su aspecto musculoso, muy aceptado en el escenario chino para el cual está destinado este 6WR, aunque habrá que ver que sucede con DS como marca Premium ante sus primeros exámenes en uno de los mercados más grandes del mundo.