El Dakar no finalizará sin mostrar capacidad ilimitada para seguir asombrando.
Aunque creemos que casi todo lo que podía deparar se vivió en esta quinta etapa.
Todo comenzó cuando comenzaron a advertirse algunos atrasos muy importantes en la categoría Autos.
Casi de inmediato, se anunció que el segundo tramo de la especial, luego de la neutralización, se cancelaría para Motos y Quads “por razones de seguridad” (luego se supo, que había sido por un piquete en la ruta, a cargo de trabajadores tabacaleros, por reclamos económicos).
No obstante el acortamiento, los problemas de navegación arreciaron previo a la nueva llegada final, donde Comá y su “mochilero” Viladoms fueron los únicos que escaparon a la tendencia.

Conclusión: Comá ganó la etapa, Viladoms llegó a casi 13 minutos y del resto, quien quedó más cercano (Rodrigues) apareció recién 26 minutos atrás del catalán.
Demás está decirles que este fue un tremendo golpe para Barreda, el hasta entonces líder de la carrera (además de la navegación, su moto tuvo problemas de combustible y llegó a más de 44 minutos en la etapa) que desde ahora solo podrá oler los gases de escape de la KTM de Coma, a más de 41 minutos en la General del triple ganador del Dakar.

El resto no está como para inquietar a Comá: López a 53 minutos, Viladoms a casi una hora, Duclós quedó a 1h02m…y, entre los penalizados y desorientados, el Quíntuple Després fue quien perdió más que ninguno, ahora está a 2h32s de su archirrival y, salvo una hecatombe, sin ninguna posibilidad de ir a buscar su sexto Dakar.
En Autos todo fue más o menos similar.
Muchos problemas de navegación para líderes y comparsa, solo Roma y De Villiers, superaron el conflictivo waypoint que complicó a la mayoría.

A tal punto que, luego de la llegada a destino, se conocieron las penalizaciones de una hora que citamos antes, precisamente, por no “marcar paso” por dicha referencia en el camino.
Del lote de los afectados, el que menos perdió fue Orlando Terranova, finalizando a casi 21 minutos, lo que, sumado a la penalización a Al-Attiyah, lo ubicó segundo aunque a algo más de media hora de su compañero Coma.
Sin embargo, la característica de este 36ª edición de Dakar, quedó bien expuesta en estas primeras cinco etapas donde pasó casi de todo y nada hace suponer que no seguirá pasando…

Y lo que es peor, en el marco más exigente que ni el más aventurado podría haber imaginado: “Este fue el tramo más duro de todos los Dakar corridos en Sudamérica”, remató un Terranova, satisfecho, pero tan agotado que sólo pidió retirarse a descansar…
Peterhansel, zafó de la penalización pero perdió más en el dichoso waypoint, quedó a 40 minutos de Comá y cierra el 1-2-3 de Mini, con el siempre peligroso De Villiers, a poco más de un minuto-20.
Salvo imponderables, todo hace suponer que el ganador del Dakar no escapará de estos cuatro nombres, aunque a juzgar por lo que está pasando, preferimos no hacer futurología…

Entre los Quads, casi todos fueron penalizados ayer, no obstante, eso no los eximió de los problemas de navegación que tuvieron casi todos hoy.
En medio de este panorama, que hasta hizo que la clasificación de ayer se cambiara a la madrugada de hoy sin ningún tipo de anuncio oficial (¿¡!?), el uruguayo Lafuente doblegó por poco más de un minuto-20 segundos a Casale y le sacó 11 minutos al retrasado Copetti.
Con las cuentas más o menos ordenadas, Lafuente aventaja por casi 17 minutos al chileno, con Sonik a más de 23 minutos y Husseini poco menos que marginado a 1h45m45s.

Los Camiones fueron la única especialidad que tuvo un desarrollo lo más parecido a lo normal de una etapa-Dakar.
En Kamaz insisten en quebrar a De Rooy y hoy atacaron nuevamente.
Esta vez lograron algo más que en lo tramos anteriores, De Rooy cedió poco más de 12 minutos frente a Sotnikov y casi tres con Karginov, su más inmediato perseguidor en la General, por lo que la reducción fue mínima y el holandés del Iveco le sigue llevando más de media hora.

Ante el retraso de Van Vliet, tercero está Nikolaev (Kamaz) a casi 1h10m, luego Sotnikov a casi 1h20m y en seguida Stacey (Iveco).
O sea que De Rooy está perseguido por tres Kamaz, nada tranquilizador considerando los que significa el equipo Kamaz y todo lo que falta por delante.
Precisamente, si hay algo que caracteriza a este Dakar 2014 es todo lo que ha sucedido en apenas cinco etapas, lo que por el momento lo propone como uno de los más excitantes de la historia, y nada hace suponer que esta tendencia pueda cambiar en las ocho etapas que faltan…