Las posibilidades son varias y todas arrancan a partir de una idea consumada con la misma familia 200 de Peugeot, como lo fueron los 205 y 206, ambos modelos que, en momentos críticos de la marca, reforzaron enormemente desde lo deportivo (WRC y Dakar), a la propuesta original respectiva que, en cada caso, finalmente, ayudó en mucho a la recuperación de la compañía.
Hoy, PSA Peugeot-Citroen, está viviendo otro momento delicado a nivel mundial y, nuevamente, es la familia 200, a través del 208, la que se encuentra con una posibilidad históricamente similar desde lo deportivo.
El primer paso fue la cancelación del proyecto 908 para Le Mans, una aventura con altos costos a partir de la tecnología aplicada (propulsión híbrida diesel-eléctrica) y de todo lo que proponía un prototipo inédito.
Con el 908 se podía aspirar en forma excluyente a un rédito desde lo que suponía la validación tecnológica e imagen de la marca.
En cambio, con la silueta 208, además de la imagen de la marca, se podría aspirar al soporte del propio modelo de calle, la primera línea en lo que refiere a ventas e ingresos económicos tan necesarios en estos particulares momentos del grupo.

Cuando surgió el tema del “asalto a Pikes Peak” varios comentarios comenzaron a orientarse hacia esta última posibilidad, luego se supo de la reunión de Stephane Peterhansel con directivos de la marca, coincidiendo con lo cual se habla de que Peugeot podría estar en el Dakar 2015, justo cuando Peterhansel finaliza su contrato con el X-raid, ¿solo coincidencia?.
Ahora llega la presencia del 208 Pikes Peak en el circuito Paul Ricard, uno de los escenarios elegidos por el grupo para toda aventura deportiva (recordar el Citroen C4-Elysée en sus primeros pasos…).
Quizás solo sean coincidencias y se trate de otro tipo de movida en ambos casos, aunque de una cosa estamos seguros, Peugeot fue históricamente una de las marcas más comprometidas del mundo con lo deportivo (F.1, Prototipos, WRC, Dakar, etc) y lo hizo en momentos y situaciones tan complicadas como la que vive ahora, cosa que quedó bien en claro cuando la familia 200 “salió al rescate”, entonces, ¿por qué no intentarlo nuevamente?...