Jornada poco menos que definitoria resultó las Seis Horas del Circuito de las Américas, en Austin, Texas, EE.UU.
Con su performance allí, Audi, a través del 1-3 con Duval-Kristensen-McNish y Treluyer-Fassler-Lotterer, sumó los puntos necesarios que, de insistir Toyota presentando un solo auto en las tres pruebas que faltan, ponen a la marca alemana a punto de coronarse en el Mundial de Resistencia 2013 (WEC).
También tomó un rumbo similar el campeonato de pilotos donde, el trío vencedor aquí, supera a la otra tripulación de Audi por 33 puntos, ventaja poco menos que indescontable a partir de la realidad de la categoría, que hace que con solo salir segundos en las tres carreras que faltan, Duval-Kristensen-McNish serán los campeones de 2013.

Pero esta orientación casi definitoria que tomaron los torneos de la especialidad, en este caso, tuvo una ardua concreción.
Principalmente, por la performance del único Toyota TS030 oficial (Davidson-Sarrazin-Buemi) que, si bien no mostró la velocidad de los Audi, propuso un rendimiento de los neumáticos que hacía que estos debieran ser cambiados cada dos paradas en boxes por combustible, a diferencia de los Audi que debían cambiar gomas en cada repostaje.

El tiempo que el Toyota ganaba en boxes, debía ser compensado en pista por Audi y esa fue la característica de la carrera que, a la hora del banderazo final, mostró solo 23 segundos de diferencia a favor del Audi vencedor sobre el Toyota.
Las posibilidades del Toyota se incrementaron todavía más desde los primeros tramos, a partir de algunos problemas con rezagados que tuvo el Audi nº1 (Treluyer-Fassler-Lotterer) y de una parada extra en boxes para reparar parte de la carrocería dañada en esos escarceos.

No obstante, el rendimiento de Duval-Kristensen-McNish fue impecable en pista y neutralizaron la amenaza que significó Toyota en esta prueba, que fue en la que la marca nipona estuvo más cerca de quebrar el invicto de Audi en 2013.
En LMP1, el Audi R18 e-tron quattro de Duval-Kristensen-McNish logró la victoria, recorriendo, al cabo de las Seis Horas de Austin, 187 vueltas, seguido, con el mismo número de giros, por el Toyota TS030 de Davidson-Sarrazin-Buemi a 23s617/1000 y tercero llegó el restante Audi (Treluyer-Fassler-Lotterer) con una vuelta menos.

En LMP2, los autores del mejor tiempo de ayer (Rusinov-Martin-Conway) no tuvieron mayores inconvenientes en estirar paulatinamente su ventaja sobre el segundo, quien en este caso fue el Oreca 03 similar al ganador, del Pecom Racing, a cargo de Kaffer-Minassian-Perez Companc. El trío vencedor completó 178 vueltas y superó por una al auto del equipo argentino.
En las dos clases del GTE hubo sendos triunfos de los Aston Martin Vantage V8.

En GTE Pro, la victoria fue para los autores de la pole de ayer, Senna-Malowiecki (167 vueltas) quienes aventajaron por poco más de 15 segundos a la Ferrari 458 Italia de Bruni Fisichella.
En GTE Am, ganaron Hall-Campbell Walker (165 vueltas) quienes superaron, luego de una gran batalla que duró buena parte de la etapa final de la prueba, por apenas 1s729 a otro Aston Martin Vantage V8 (Nygaard-Poulsen-Thiim) al cabo de las seis horas de carrera.
La siguiente prueba del WEC será la sexta del calendario, las Seis Horas de Fuji, Japón, el próximo 20 de octubre.