Cuatro etapas y 1.500 kilómetros proponía el Sealine Rally of Qatar, la segunda prueba en 15 días de lo que fue una especie de “torneo de Medio-Oriente” de la especialidad y que integró a este con el Desert Challenge de Abu Dhabi.
Y si bien los resultados fueron algo diferentes, lo que no cambió fue la tendencia, dejando en evidencia un particular momento de la especialidad, tanto en Autos como en Motos.
Favorecido, es cierto, por un terreno arenoso, pero de base dura, y arenas firmes como las que hubo en varios tramos a las orillas del Golfo Pérsico, el buggy del legendario Jean-Louis Schlesser no tuvo rivales, dominando desde los primeros tramos, tal como puso en evidencia en Abu Dhabi, donde fue segundo de Roma y su Mini, pero dejando sentado que, después de problemas iniciales que lo retrasaron mucho, era la combinación a batir.

Esto marca un sensible predominio del formato buggy que, con tracción 4x2, suspensiones de largo recorrido y control de inflado, no solo son más veloces, sino que están mejor adaptados a las irregularidades y ahorran tiempo ante la modificación de la presión de los neumáticos desde el cockpit.
Esta circunstancia la aprovechó sin dudar Schlesser que nunca vio peligrar su posición pese a los embates del siempre rápido Holowczyc (Mini) a quien solo le alcanzó para ganar un tramo y ser segundo al final, aunque a más de 31 minutos.

Del nutrido grupo de Toyota del Overdrive, al cual no se sumó el argentino Alvarez ya que su Hilux quedó muy dañada luego del vuelco en Abu Dhabi, se destacó el venezolano Nuncio Coffaro, refirmando sus buenos antecedentes del Dakar 2013, quien accedió al podio aunque muy despegado de los líderes.
Otro para destacar fue el ruso Rakhimbayev, también con una Toyota del Overdrive, con algunos parciales de interés.

Las Motos tuvieron una batalla épica que tuvo en los pilotos de élite a sus principales protagonistas. Confirma esto lo cerrada que está resultando la competencia, más allá que, al final, el nombre de Marc Coma haya sido nuevamente el abonado al lugar más alto del podio.
El español de KTM ganó en Abu Dhabi por la penalización a Sunderland y su Honda, y aquí también lo hizo, aunque ¡por apenas cuatro segundos!...sobre Goncalves y su Speedbrain (antes Husqvarna).

Desde el comienzo, Przygonski, Chaleco López y Ullevalserter, la armada KTM, flanqueó a su líder en su cerrada lucha con Goncalves. Sin embargo, poco pudo hace a la hora de la definición sobre el final, cuando el portugués arreció en su ataque, con definición sobre la misma línea de llegada por la mínima diferencia apuntada.
Es cierto que Coma viene de algún tiempo de inactividad mezclado con la recuperación de su fuerte golpe en Marruecos 2012, pero no es menos cierto que la competencia está siendo cada vez más dura.

Importante antecedente ante una temporada que recién transita por su Ecuador, y por lo que se supone que pasará cuando vuelva Cyril Després sobre una Honda que ya mostró sus posibilidades con Sunderland en Abu Dhabi.
Como para frotarse las manos anticipando grandes batallas, en la verdadera categoría-espíritu de la especialidad raid.
El Sealine Rally of Qatar también entregó parciales de interés en materia de nuevos nombres para el futuro parque humano de la actividad.

Al del venezolano Coffaro, se le agregó el ruso Rakhimbayev, en Autos. Y en Motos, el muy buen quinto puesto del boliviano Juan Carlos Salvatierra (Honda).
Y en Quads, luego del inaccesible Rafal “Super” Sonik, un buen trabajo del tercero, el vencedor en Abu Dhabi, Abu-Issa, y del argentino Pable Copetti que, a diferencia de Abu Dhabi, donde debió abandonar, aquí peleó en todo momento en el trío de punta para arribar finalmente cuarto, en lo que seguramente será una gran experiencia para el consistente Copetti.