A medida que se acerca el 30 de junio, el día en que Peugeot y Sebastien Loeb retarán a “la montaña”, surgen nuevos datos a propósito del impresionante vehículo con el que lo intentarán.
La compañía encasilla al 208 T16 Pikes Peak como “un prototipo de carreras de resistencia”, curiosa definición si pensamos que tendrá que ser más rápido que resistente, sin embargo, este que es un impensado halago para los prototipos modernos (Audi R18, Toyota TS030 y hasta el Peugeot 908 de Le Mans), no los descalifica en cuanto a su respuesta velocista.

Para estar a la altura de las circunstancias, el proto Peugeot , estará impulsado por un motor V6 a 60º de 3.2 litros biturbo al cual se le extrajeron 875 CV.
Montado en posición central sobre un chasis mixto, multitubular y carbono, de 875 kilos, entrega la fantástica relación peso/potencia de 1:1.

El ingeniero Jean-Christophe Pallier, que tan oportunamente deslizó la frase con que titulamos, corroboró: “…en realidad, la imaginación es el único límite cuando se piensa en un auto para Pikes Peak. Esta fue la única forma de lograr una relación peso/potencia 1 a 1, una cifra mágica y simbólica”.

Pero el 208 T16 no se agota en la magia y el simbolismo…utiliza la caja de seis marchas, los frenos de carbono, la toma dinámica del motor y el alerón de dos metros de ancho que supo usar el prototipo 908 de Le Mans.
Porque en algunos tramos podría llegar hasta más de 240 km/h, y será misión de piloto, aerodinámica y frenos, controlar tamaño despliegue de performance.

Y los números nos hacen entender con más claridad…Se prevé una variación de velocidad en la trepada de entre 50 y 240 km/h, acelerará de 0 a 100 km/h en apenas 1s8/10, y logrará su máxima de 240 km/h en solo siete segundos…!!!.