Si bien ya se conocía su actualización 2013, la versión europea del Jeep Grand Cherokee supone otra vuelta de tuerca sobre un diseño general reconocido y aceptado.
Realmente, a esta altura, casi nos sentimos obligados a reconocer la silueta como una de las más logradas del segmento SUV, por concepto general, vigencia y por esa siempre fresca y actualizada propuesta que surge de cada renovación.

Esta vez, bastaron algunas mínimas modificaciones en el sector frontal para acompañar a las nuevas ópticas tipo Chrysler 300 (con iluminación diurna) y una nueva parrilla para que el diseño de la zona comenzara a convencer.
Atrás, los cambios fueron mayores, con un nuevo portón y grupos ópticos totalmente nuevos, muy agradables e impecablemente integrados a la estética general.

Como suele ser habitual en este tipo de restyling, las modificaciones llegan acompañadas de nuevas llantas de aleación y nuevos colores, lo que siempre potencia los cambios…sin que cambie mucho (recordar, “Il Gatopardo”).
En el interior, el instrumental es completamente nuevo, con volante multifunción de diseño diferente y otros mandos para la climatización. Los materiales de calidad abundan, así como las funciones del nuevo equipo de audio y navegación.

En lo que tiene que ver con sus órganos mecánicos, todo hace suponer que continuará la gama de motorizaciones nafteras V6 y V8 de entre 190 y 352 CV, con el top de la serie asignado a la versión SRT8 que montará el Hemi de 468 CV. Respecto a Europa, el motor principal será el VM diesel de origen italiano V6 de 3.0 litros.
Todas las versiones tendrán su modelo homenaje “70th Aniversary”, con detalles superiores y mayores posibilidades.