16 Dakar.
Los grandes coronados, Stephane Peterhansel y Cyril Després, reúnen nada menos que 16 Dakar ganados.
Peterhansel logró seis en Motos y cinco en Autos, mientras que Després alcanzó con este su quinto Dakar en Motos, igualando la cifra del legendario Cyril Neveu.
Pilotos superiores, maestros de la intuición, versátiles, pero sobre todo, grandes profesionales que han hecho de la gran aventura Dakar su “coto de caza”.

Dominio KTM.
El podio completo de las Motos, con Després, Faría y Chaleco López, el ídolo local.
Además, un común denominador los convocó, KTM, la marca austríaca que no contenta con alcanzar el podio completo, también sumó al cuarto y al quinto colocados.
Una vez más, KTM demostró performance y confiabilidad, factores clave para este tipo de prueba.

La Revancha de Kamaz.
Los tripulantes del camión Kamaz nº501, ganador de la carrera, con Edouard Nikolaev a la cabeza, alzan los bronceados touaregs sobre sus cabezas celebrando una victoria que no se vislumbraba en los primeros tramos de la carrera.
Sin embargo, la marca rusa colocó tres vehículos en los tres primeros lugares, postergando al cuarto puesto al mismo Iveco que los había vencido en 2012.

Los Hermanos Sean Unidos.
Alejandro Patronelli le dio una sorpresa a su hermano Marcos y se le apareció en Chile para recibirlo vencedor.
Entre ambos, han ganado cuatro Dakar en Cuatriciclos y más allá de lo que pueda suceder en el futuro, la saga que establecieron tiene pocos antecedentes en “la última gran aventura del deporte motor”.
En una división más nutrida de participantes y con rivales de mayor peso, el menor de los Patronelli, estableció diferencias contundentes y neutralizó toda oposición.

Toyota Team.
Ronnie Graue y Lucio Alvarez flanquean a Giniel De Villiers. El grupo formó parte del multirracial grupo de participantes de primera línea que presentó Toyota.
El sudafricano, “es el rival a cual mas le temo en esta carrera”, según Peterhansel, y no lo defraudó, terminó segundo intercalado entro los integrantes del equipo Mini.
El argentino, venía tercero, tuvo problemas al golpear contra “un piedrón” según sus propias palabras, quedó 27º y con un esforzado trabajo terminó 10º.

Chicos Grandes.
Peterhansel y su navegante Cottret celebran sobre el Mini vencedor. Los autos del X-Raid habían triunfado en 2012 utilizando motores “prototipo”; aunque para este año cambió el reglamento, obligándolos a utilizar unidades “derivadas de serie” y lograron un rendimiento muy similar.
Además, tuvieron una oposición mucho más seria en los buggies que, favorecidos con otra medida de brida de entrada de aire a sus motores, lograron un rendimiento superior.
Gran performance, con tres Mini en los cuatro primeros lugares.

Primer Ganador Argentino.
Orlando Terranova, aquí con su navegante el portugués Fiuza, sobre el único BMW X3 del X-Raid, se convirtió en el primer argentino que gana un parcial Dakar en Autos.
Pero además, brindó un rendimiento mucho más adecuado a este tipo de carrera, con un gran ritmo, centrado en su objetivo y consolidado en el grupo de cabeza abonado “al grupo de los cinco”, pocas veces se bajó del podio de cada etapa.