Industria Automotriz
PRODUCCION
HECHO PARA LA OCASION
16/11/2012. Se inició en Santa Isabel, Córdoba, la producción del Clio Mío. Desde una inversión de 400 millones de pesos, se harán 65.000 unidades/año con más del 60% destinado a la exportación. Producto de bajo costo cuyo debut, que debió de haber sido una fiesta, resultó poco menos que un papelón.
Algunas presentaciones de los últimos tiempos, nos demostraron las limitaciones de un mercado regional que ya parece acostumbrado a aceptar productos añosos que una y otra vez son “refritados” para la ocasión.
Y el inicio de la producción del llamado Clio Mío dio una nueva prueba de que, por el momento y puntualmente, la región no deberá esperar otra cosa con productos low-cost.
Lo que no le quita a este inicio de producción, su importancia como herramienta social en una geografía tan sensible como la de la provincia de Córdoba.
No obstante, la propuesta sigue refiriendo al inicio.
Se trata de un profundo repaso sobre la base Clio II, con clara intención de actualizarla para asemejarla a la más moderna Clio IV, presentada recientemente en Francia, de la cual recibe una fuerte impronta de marca y poco más.
Un desarrollo que fue realizado por el equipo de Renault Argentina donde, la identidad visual y múltiples posibilidades de personalización, son el leit motiv de la propuesta.
El nuevo modelo reemplazará al anterior Clio, utilizará su misma plataforma y sale a la luz luego de una inversión inicial de 400 millones de pesos, con el objetivo de producción de unos 65.000 vehículos/año, destinados en poco más de un 60% a la exportación (Brasil será el principal receptor). El nuevo Renault Clio Mío, iniciará localmente su comercialización en el próximo mes de diciembre.
Mas allá de las alternativas puntuales de fabricación y comercialización, la presentación contó con la presencia de altas autoridades de la compañía, nacionales y provinciales (destacándose las de la Ministra de Industria de la Nación, Débora Giorgi y la del Gobernador de la Provincia de Córdoba, José Manuel de la Sota) precisamente, quienes por sobre la importancia del acto, se trenzaron en una confrontación altamente politizada, que no respondía al espíritu de la ceremonia. Con lo que, Provincia y Nación, dieron una imagen que distó mucho de ser la ideal ante la opinión pública local e internacional.
Una ocasión como esta no lo merecía.